Devuelve a tu cuerpo
la necesidad de no existir
que tiene tu alma.
son la poesía que habita en mi cuerpo,
y apenas son materia
porque se desvanecen.
de alguna parte,
pero yo no los veo,
probablemente debido a los dos años
de observación premeditada y constante
del sol,
porque no tenía párpados
aquellos días y no podía pestañear
ni una sola vez.
Ahora estoy ciega,
no veo nada
y no tengo conciencia de lo que soy,
podría ser una flor o un escarabajo
porque mi oído se modula con el viento
y a veces tampoco escucho nada.
eres una sombra
densa y piedrangular,
y amenazas con derramarte en cualquier momento.